ASOCIACIÓN
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Deducción en el impuesto sobre Sociedades
Deducciones fiscales para empresas: reduce hasta un 40% en el Impuesto sobre Sociedades con donaciones a asociaciones sin ánimo de lucro y fortalece tu responsabilidad social.
Las empresas que realicen donaciones, donativos o aportaciones a entidades sin ánimo de lucro pueden beneficiarse de una deducción en la cuota íntegra del Impuesto sobre Sociedades.
Cuantía de la deducción
- 35% de la donación: En general, las empresas pueden deducir el 35% de la cantidad donada o aportada a la asociación sin ánimo de lucro en su declaración del Impuesto sobre Sociedades.
- 40% de la donación: Si la empresa ha realizado donaciones a la misma entidad por un importe igual o superior durante al menos tres años consecutivos, la deducción se incrementa al 40% de la cantidad donada.
Límite de la deducción
El importe de la deducción no puede superar el 10% de la base imponible del periodo impositivo. Si en un año no se alcanza este límite, el exceso puede aplicarse en los periodos impositivos que concluyan en los diez años inmediatos y sucesivos.
Requisitos para aplicar la deducción
Para poder aplicar la deducción, la empresa debe asegurarse de que la entidad receptora de la donación esté inscrita como entidad beneficiaria de mecenazgo y cumpla con los requisitos establecidos en la Ley 49/2002, de régimen fiscal de las entidades sin fines lucrativos y de los incentivos fiscales al mecenazgo.
Además, la empresa deberá disponer del certificado de donación expedido por la entidad beneficiaria, en el que se detallen los datos de la donación y se acredite el cumplimiento de los requisitos para aplicar la deducción.
Beneficios adicionales
Además de la deducción fiscal, las empresas que apoyan a asociaciones sin ánimo de lucro pueden mejorar su imagen corporativa, contribuir a la responsabilidad social empresarial (RSE) y fortalecer su relación con la comunidad.
En resumen, las aportaciones a asociaciones sin ánimo de lucro no solo benefician a la sociedad y al medio ambiente, sino que también pueden ofrecer ventajas fiscales significativas para las empresas. ¡Una razón más para contribuir a causas que importan!
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Daniel Pérez Merino
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Una de las formas más efectivas de reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) es cuidando de los sumideros de CO2. Estos sumideros son organismos que, de manera natural, absorben estos gases y disminuyen su concentración en la atmósfera. Los árboles son un excelente ejemplo de sumideros, y dentro de ellos, los olivos son especialmente eficientes en esta tarea.
Los olivos no solo absorben CO2 y otros gases de efecto invernadero, sino que los utilizan en sus procesos internos, como el crecimiento y la producción de frutos. Mientras realizan esta importante labor, también nos devuelven oxígeno a la atmósfera, ayudando a purificar el aire que respiramos.
Cuidar y proteger estos sumideros, como los olivos, es esencial para mantener el equilibrio de nuestro planeta y mitigar el cambio climático. Además, plantar más árboles y preservar los bosques existentes puede hacer una gran diferencia en la lucha contra el calentamiento global. ¡Cada olivo cuenta para un futuro más verde!
